Encontrados 568 resultados para: justicia divina

  • Pues toda la Escritura divinamente inspirada es útil para enseñar, para reprender, para corregir, para educar en la justicia, (II Timoteo 3, 16)

  • nos ha salvado, no por la justicia que hayamos practicado, sino por puro amor, mediante el bautismo regenerador y la renovación del Espíritu Santo, (Tito 3, 5)

  • Del Hijo, en cambio, afirma: Tu trono, oh Dios, dura eternamente; y: el cetro de tu reino es cetro de justicia. (Hebreos 1, 8)

  • Has amado la justicia y odiado la iniquidad; por eso Dios, tu Dios, te ha ungido con óleo de alegría con preferencia a tus compañeros. (Hebreos 1, 9)

  • Ahora bien, aquel que se alimenta de leche no puede gustar la doctrina de la justicia, porque es niño todavía. (Hebreos 5, 13)

  • y a quien Abrahán dio la décima parte de todo; cuyo nombre se interpreta en primer lugar como "rey de justicia", y también como rey de Salén, es decir, "rey de paz", (Hebreos 7, 2)

  • Por la fe Noé, divinamente advertido acerca de las cosas que todavía no se veían, movido de un religioso temor, construyó un arca para salvar a su familia; por la fe condenó al mundo y se convirtió en heredero de la justicia que se obtiene por la fe. (Hebreos 11, 7)

  • Por la fe Abrahán, obedeciendo la llamada divina, partió para un país que recibiría en posesión, y partió sin saber a dónde iba. (Hebreos 11, 8)

  • los cuales por la fe subyugaron reinos, ejercieron la justicia, alcanzaron las promesas, cerraron la boca de los leones, (Hebreos 11, 33)

  • Es cierto que todo castigo, en el momento de recibirlo, es desagradable y motivo de disgusto; pero después, en los que se han ejercitado en él, produce frutos de paz y de justicia. (Hebreos 12, 11)

  • porque el hombre airado no practica la justicia de Dios. (Santiago 1, 20)

  • Se cumplió la Escritura, que decía: Abrahán creyó en Dios y le fue tenido como justicia y fue llamado amigo de Dios. (Santiago 2, 23)


“Mantenha-se sempre muito unido à Igreja Católica, pois somente ela pode lhe dar a verdadeira paz, porque somente ela possui Jesus Sacramentado que é o verdadeiro príncipe da paz.” São Padre Pio de Pietrelcina