Talált 426 Eredmények: agua viva
Entre esta agua de maldición en tus entrañas hasta que se hinche tu vientre y malogre tu criatura. La mujer contestará: ¡Que así sea! (Números 5, 22)
El sacerdote pondrá por escrito estas maldiciones y las disolverá en el agua amarga. (Números 5, 23)
Hará beber a la mujer el agua amarga de la maldición hasta que penetre en ella y le produzca amargura. (Números 5, 24)
tomará de ella un puñado, como memorial, y lo quemará sobre el altar. Hará beber luego el agua a la mujer. (Números 5, 26)
Cuando haya bebido el agua, si realmente se ha deshonrado engañando a su marido, el agua de la maldición entrará en ella y le producirá amargura, su vientre se hinchará, su criatura se malogrará y vendrá a ser objeto de maldición en medio de su pueblo. (Números 5, 27)
Procederás de esta manera: los rociarás con agua de la purificación; ellos se afeitarán todo su cuerpo, lavarán sus vestidos y se purificarán. (Números 8, 7)
El sacerdote lavará luego sus vestidos y su cuerpo con agua, y después entrará en el campamento, pero será impuro hasta la tarde. (Números 19, 7)
El que haya quemado la novilla lavará también sus vestidos y su cuerpo con agua, y será impuro hasta la tarde. (Números 19, 8)
Un hombre en estado de pureza recogerá las cenizas de la novilla y las depositará fuera del campamento, en un lugar puro, donde serán conservadas para hacer el agua de purificación en la comunidad de los israelitas: es un sacrificio por el pecado. (Números 19, 9)
En tales casos de impureza tomarán de la ceniza de la novilla quemada en sacrificio por el pecado, echarán sobre ella un vaso de agua corriente; (Números 19, 17)
uno que esté puro tomará el hisopo, lo mojará en agua y rociará la tienda, todos los muebles y todas las personas que estuvieran en ella y al que haya tocado huesos humanos, a un asesinado, a un muerto o un sepulcro. (Números 19, 18)
El hombre impuro que no se purifique será extirpado de la comunidad, pues contaminaría el santuario del Señor. No ha sido rociado con el agua de purificación; es impuro. (Números 19, 20)