Talált 419 Eredmények: sacerdotes

  • Como bandidos que están al acecho, una banda de sacerdotes asesina en el camino de Siquém: ¡es una infamia lo que hacen! (Oseas 6, 9)

  • Los habitantes de Samaría tiemblan por el ternero de Bet Aven. Sí, su pueblo está de duelo por él, lo mismo que sus sacerdotes: ¡que se alegren de su gloria, ahora que ha sido desterrada lejos de nosotros! (Oseas 10, 5)

  • La ofrenda y la libación han desaparecido de la Casa del Señor. Están de duelo los sacerdotes, los ministros del Señor. (Joel 1, 9)

  • ¡Vístanse de duelo y laméntense, sacerdotes! ¡Giman, servidores del altar! ¡Vengan, pasen la noche vestidos de penitencia, ministros de mi Dios! Porque se ha privado a la Casa de su Dios de ofrenda y libación. (Joel 1, 13)

  • Entre el vestíbulo y el altar lloren los sacerdotes, los ministros del Señor, y digan: "¡Perdona, Señor, a tu pueblo, no entregues tu herencia al oprobio, y que las naciones no se burlen de ella! ¿Por qué se ha de decir entre los pueblos: Dónde está su Dios?". (Joel 2, 17)

  • Sus jueces juzgan por regalos, sus sacerdotes instruyen por un sueldo, sus profetas adivinan por dinero, y todavía se apoyan en el Señor, diciendo: "¿No está el Señor en medio de nosotros? ¡No nos puede pasar nada malo!". (Miqueas 3, 11)

  • Extenderé mi mano contra Judá y contra todos los habitantes de Jerusalén; extirparé de este lugar todo lo que queda de Baal, el nombre de sus ministros y a los sacerdotes junto con ellos. (Sofonías 1, 4)

  • sus profetas son fanfarrones, hombres traicioneros; sus sacerdotes han profanado las cosas santas y han violado la Ley. (Sofonías 3, 4)

  • Así habla el Señor de los ejércitos: Consulta a los sacerdotes sobre el caso siguiente: (Ageo 2, 11)

  • "Si alguien lleva en los pliegues de su ropa carne ofrecida en sacrificio y toca con ellos pan, caldo, vino, aceite o cualquier clase de alimentos, ¿todo esto quedará consagrado?". Los sacerdotes respondieron: "¡No!". (Ageo 2, 12)

  • Ageo prosiguió: "Si alguien, contaminado por un cadáver, toca alguna de estas cosas, ¿quedarán impuras?". Los sacerdotes respondieron: "¡Si, quedarán impuras!". (Ageo 2, 13)

  • y preguntar a los sacerdotes de la Casa del Señor de los ejércitos y a los profetas: "¿Debo seguir llorando e imponiéndome privaciones en el quinto mes, como lo he hecho durante tantos años?". (Zacarías 7, 3)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina