Trouvé 77 Résultats pour: viña

  • Cuando vendimies tu viña, no harás rebusco. Lo que quede será para el forastero, el huérfano y la viuda. (Deuteronomio 24, 21)

  • Te desposarás con una mujer y otro hombre la hará suya; edficarás una casa y no la habitarás; plantarás una viña y no podrás disfrutar de ella. (Deuteronomio 28, 30)

  • Porque su viña es viña de Sodoma y de las plantaciones de Gomorra: uvas venenosas son sus uvas, racimos amargos sus racimos; (Deuteronomio 32, 32)

  • No probará nada de lo que procede de la viña, no beberá vino ni bebida fermentada, no comerá nada impuro y observará todo lo que yo le he mandado.» (Jueces 13, 14)

  • Después de estos sucesos ocurrió que Nabot, de Yizreel, tenía una viña junto al palacio de Ajab, rey de Samaría, (I Reyes 21, 1)

  • y Ajab habló a Nabot diciendo: «Dame tu viña para que me sirva de huerto para hortalizas, pues está pegando a mi casa, y yo te daré por ella una viña mejor que está, o si parece bien a tus ojos te daré su precio en dinero.» (I Reyes 21, 2)

  • El le respondió: «Porque he hablado con Nabot de Yizreel y le he dicho: "Dame tu viña por dinero o, si lo prefieres, te daré una viña a cambio", y me dijo: "No te daré mi viña."» (I Reyes 21, 6)

  • Su mujer Jezabel le dijo: «¿Y eres tú el que ejerces la realeza en Israel? Levántate, come y que se alegre tu corazón. Yo te daré la viña de Nabot de Yizreel.» (I Reyes 21, 7)

  • Cuando Jezabel oyó que Nabot había sido apedreado y muerto, dijo a Ajab: «Levántate, toma posesión de la viña de Nabot, el de Yizreel, el que se negó a dártela por dinero, pues Nabot ya no vive, ha muerto.» (I Reyes 21, 15)

  • Apenas oyó Ajab que Nabot había muerto, se levantó y bajó a la viña de Nabot, el de Yizreel, para tomar posesión de ella. (I Reyes 21, 16)

  • «Levántate, baja al encuentro de Ajab, rey de Israel, que está en Samaría. Está en la viña de Nabot, a donde ha bajado a apropiársela. (I Reyes 21, 18)

  • Uno de ellos salió al campo a recoger hierbas comestibles; encontró una viña silvestre y recogió una especie de calabazas silvestres hasta llenar su vestido; fue y las cortó en pedazos en la olla del potaje, pues no sabía lo que era. (II Reyes 4, 39)


“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina