Löydetty 114 Tulokset: labios

  • haré brotar la alabanza en sus labios. ¡Paz al que está lejos, paz al que está cerca -dice el Señor-; yo le curaré! (Isaías 57, 19)

  • Porque vuestras manos están manchadas de sangre, y vuestros dedos de perversidad; vuestros labios dicen mentira, vuestras lenguas murmuran falsedad. (Isaías 59, 3)

  • A pesar de todo, yo no te he insistido para que adelantases el desastre; no he deseado el día de la desgracia, tú lo sabes; lo que ha salido de mis labios está ante tu presencia. (Jeremías 17, 16)

  • Palabra que el profeta Jeremías dirigió a Baruc, hijo de Nerías, cuando éste escribió en un libro estas palabras dictadas de labios de Jeremías, el año cuarto de Joaquín, hijo de Josías, rey de Judá: (Jeremías 45, 1)

  • aún tenía en los labios las palabras de mi oración, cuando Gabriel, aquel personaje que había visto anteriormente en visión, volando raudo, se acercó a mí, hacia la hora de la ofrenda de la tarde, (Daniel 9, 21)

  • Entonces un ser de aspecto humano me tocó los labios. Abrí mi boca, hablé y dije a aquel que estaba delante de mí: "Señor mío, con esta aparición me invade un malestar y me quedo sin fuerzas. (Daniel 10, 16)

  • He oído, y estoy profundamente conmovido; a tu voz tiemblan mis labios; estoy completamente descompuesto, mis pasos vacilan al andar. Tranquilo espero el día de la angustia, que ha de caer sobre el pueblo que nos asalta. (Habacuc 3, 16)

  • Yo daré entonces a los pueblos labios puros para que invoquen todos el nombre del Señor y le sirvan de común acuerdo. (Sofonías 3, 9)

  • Tenía en su boca la verdadera doctrina, y en sus labios no se encontró falsedad alguna, sino que se portaba conmigo con integridad y rectitud, y a muchos otros apartó del mal camino. (Malaquías 2, 6)

  • Pues los labios del sacerdote deben guardar la ciencia, y de su boca se viene a buscar la enseñanza, porque él es el mensajero del Señor todopoderoso. (Malaquías 2, 7)

  • Este pueblo me honra con sus labios, pero su corazón está lejos de mí; (Mateo 15, 8)

  • Él les contestó: "Hipócritas, Isaías profetizó muy bien acerca de vosotros, según está escrito: Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. (Marcos 7, 6)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina