Löydetty 109 Tulokset: ángeles caídos

  • Pues creo que Dios nos ha presentado a nosotros, los apóstoles, como lo último, como condenados a muerte, porque hemos llegado a ser el espectáculo del mundo, de los ángeles y de los hombres. (I Corintios 4, 9)

  • ¿No sabéis que hasta juzgaremos a los ángeles? Con mucha más razón las cosas de esta vida. (I Corintios 6, 3)

  • Por esto la mujer debe llevar en la cabeza una señal de sujeción por respeto a los ángeles. (I Corintios 11, 10)

  • Aunque hable las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, no soy más que una campana que toca o unos platillos que resuenan. (I Corintios 13, 1)

  • Entonces, ¿para qué la ley? Fue añadida para declarar lo que era delito hasta que llegara el descendiente a que se refería la promesa. La ley fue promulgada por ángeles a través de un mediador. (Gálatas 3, 19)

  • Que nadie, con simulada humildad o culto de ángeles, os niegue el premio de la victoria, metiéndose en cosas que no ha visto, presumiendo vanamente a la luz de su inteligencia carnal, (Colosenses 2, 18)

  • y a vosotros, que sufrís, daros el descanso en compañía nuestra, cuando Jesús, el Señor, aparezca en el cielo con sus ángeles poderosos, (II Tesalonicenses 1, 7)

  • Y sin duda alguna es grande el misterio de nuestra religión: "Que se ha manifestado como hombre, ha sido acreditado por el Espíritu, se ha mostrado a los ángeles, ha sido anunciado a las naciones, creído en el mundo, elevado a la gloria". (I Timoteo 3, 16)

  • Yo te conjuro ante Dios, ante Cristo Jesús y ante los ángeles elegidos, que observes estas cosas imparcialmente, sin dejarte llevar de favoritismos. (I Timoteo 5, 21)

  • llegando a ser superior a los ángeles en la medida en que los aventaja el nombre que ha recibido en herencia. (Hebreos 1, 4)

  • En efecto, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios alguna vez: Tú eres mi hijo, yo te he engendrado hoy; y además: Yo seré su Padre, y él será mi Hijo? (Hebreos 1, 5)

  • Y de nuevo, cuando introdujo al Primogénito en el mundo, dijo: Que le adoren todos los ángeles de Dios. (Hebreos 1, 6)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina