Löydetty 475 Tulokset: ciudades conquistadas
Así Moisés asignó a los gaditas, a los rubenitas y a la mitad de la tribu de Manasés, hijo de José, el reino de Sijón, rey de los amorreos, y el reino de Og, rey de Basán: el territorio con sus diversas ciudades y el territorio de los poblados vecinos. (Números 32, 33)
Los gaditas reedificaron las ciudades fortificadas de Dibón, Atarot, Aroer, (Números 32, 34)
Nebo, Baal Meón -algunos nombres fueron cambiados- y Sibmá: ellos pusieron sus propios nombres a las ciudades reedificadas. (Números 32, 38)
Nobá fue a conquistar Quenat y sus ciudades dependientes, y les puso su propio nombre: Nobá. (Números 32, 42)
Ordena a los israelitas que cedan a los levitas, de su patrimonio hereditario, ciudades para vivir y campos de pastoreo alrededor de las mismas. (Números 35, 2)
Las ciudades les servirán de morada, y los campos de pastoreo serán para su ganado y sus otros animales. (Números 35, 3)
Los campos de pastoreo de las ciudades que ustedes cederán a los levitas, se extenderán hasta quinientos metros alrededor de la ciudad, a partir de las murallas. (Números 35, 4)
Ustedes medirán fuera de la ciudad, mil metros hacia el este, mil hacia el sur, mil hacia el oeste y mil hacia el norte, tomando la ciudad como centro: estos serán los campos de pastoreo para las ciudades. (Números 35, 5)
Las ciudades que cederán a los levitas serán las seis ciudades de refugio que ustedes deben separar para que los homicidas puedan huir a ellas, añadiendo además, otras cuarenta y dos. (Números 35, 6)
Así darán a los levitas un total de cuarenta y ocho ciudades, todas ellas con sus campos de pastoreo. (Números 35, 7)
Cuando cedan esas ciudades, tomándolas de lo que es propiedad de los israelitas, exigirán más de los grupos numerosos, y menos de los grupos más pequeños. De esta manera, cada uno cederá a los levitas una cantidad de ciudades proporcionada a la herencia que haya recibido. (Números 35, 8)
encontrarán ciudades que les servirán como ciudades de refugio, donde puedan huir los homicidas que hayan matado a alguien involuntariamente. (Números 35, 11)