Löydetty 228 Tulokset: espina en la carne
Entonces el Angel de Dios le dijo: «Toma la carne y los panes; déjalos en esta piedra, y el caldo, arrójalo.» (Jueces 6, 20)
Gedeón lo hizo así. En ese momento el Angel de Yavé extendió el bastón que tenía en la mano y tocó la carne y los panes. De repente una llamarada salió de la roca. El fuego quemó la carne y los panes y el Angel de Yavé desapareció. (Jueces 6, 21)
Cuando alguien ofrecía un sacrificio, y mientras se estaba cociendo la carne, venía el mozo del sacerdote con un tenedor de tres dientes en la mano, (1 Samuel 2, 13)
así hacían con todos los israelitas que venían a Silo. Incluso antes de que se hubiera quemado la grasa, el sirviente del sacerdote venía y decía al que sacrificaba: «Dame la carne para asársela a su gusto al sacerdote, ya que no aceptará carne cocida, sino solamente carne cruda.» (1 Samuel 2, 15)
y repartió a todo el pueblo, hombres y mujeres, a cada uno un pastel, una porción de carne asada y un pan de pasas. Después se fueron todos, cada uno a su casa. (2 Samuel 6, 19)
Digan también a Amasá: ¿No eres tú de mis huesos y de mi carne? Que Dios me castigue si no te hago para siempre jefe de mi ejército, en lugar de Joab.» (2 Samuel 19, 14)
y los cuervos le llevaban pan por la mañana y carne por la tarde, y tomaba agua del torrente. (1 Reyes 17, 6)
Pero Eliseo tomó los bueyes y los sacrificó. Asó su carne con la madera del arado y la repartió a su gente para que comiera. Después partió en seguimiento de Elías y entró a su servicio. (1 Reyes 19, 21)
Eliseo mandó un mensajero a decirle: «Anda al río Jordán y lávate siete veces, y tu carne se volverá como antes y serás purificado.» (2 Reyes 5, 10)
Cuando avisaron a Jehú, dijo: «Es lo que Elías de Tisbé había dicho de parte de Yavé: En el campo de Jezrael, los perros comerán la carne de Jezabel. (2 Reyes 9, 36)
Todo Israel se congregó en torno a David, en Hebrón, y le dijeron: «Somos nosotros de tu carne y de tus huesos. (1 Crónicas 11, 1)
y repartió a todo el pueblo de Israel, hombres y mujeres, a cada uno, una torta de pan, una porción de carne asada y un pastel de pasas. (1 Crónicas 16, 3)