Fundar 179 Resultados para: restaura mi alma

  • Llegó hasta el hombre de Dios y se abrazó a sus pies. Entonces se acercó Guejazí para separarla, pero el hombre de Dios le dijo: «Déjala, porque su alma está amargada y Yavé no me lo hizo saber ni me ha revelado el motivo de su pena.» (2 Reyes 4, 27)

  • El rey estaba de pie junto a la columna; pactó la alianza en presencia de Yavé, comprometiéndose a seguirlo, a guardar sus mandamientos y sus leyes, y a respetar sus ordenanzas. Se comprometió a mantener esta alianza según lo escrito en el Libro, con todo su corazón y toda su alma. Y todo el pueblo se comprometió con él. (2 Reyes 23, 3)

  • No hubo antes ningún rey que, como él, se volviera a Yavé con todo su corazón, con toda su alma y con todas sus fuerzas, observando toda la Ley de Moisés; ni después de él se manifestó otro que se le pareciera. (2 Reyes 23, 25)

  • Dedíquense, pues, de todo corazón y alma a buscar a Yavé, su Dios. Levántense y edifiquen el Santuario de Yavé, su Dios, y que se traslade el Arca de la Alianza y las cosas sagradas de Dios a la casa edificada al nombre de Yavé.» (1 Crónicas 22, 19)

  • si se vuelven a ti con todo su corazón y con toda su alma en el país de su destierro al que fueron deportados, y te suplican vueltos hacia la tierra que tú diste a sus padres y hacia la ciudad que tú has elegido y hacia la Casa que yo he edificado a tu nombre, (2 Crónicas 6, 38)

  • Acordaron buscar a Yavé, el Dios de sus padres, con todo su corazón y toda su alma: en esto consiste la Alianza; (2 Crónicas 15, 12)

  • El rey se mantuvo de pie sobre su estrado y celebró la Alianza en presencia de Yavé, tomando el compromiso de caminar tras Yavé y guardar sus mandamientos, sus testimonios y sus preceptos con todo su corazón y con toda su alma, cumpliendo las palabras de la Alianza escritas en aquel libro. (2 Crónicas 34, 31)

  • Como yo me acordaba de Dios con toda mi alma, (Tobías 1, 12)

  • Yo alabaré a mi Dios, Rey de los cielos, y mi alma radiante de alegría proclamará su grandeza. (Tobías 13, 9)

  • ¡Dichosos los que te aman y se alegran de tu paz! Dichosos también los hombres que lloran tus calamidades, pues se alegrarán en ti al ver tu alegría completa y compartirán tu alegría para siempre. Bendice, alma mía, al Señor y gran Rey, (Tobías 13, 16)

  • sus sandalias atrajeron su mirada y su belleza encadenó su alma. ¡El sable atravesó su cuello! (Judit 16, 9)

  • Por eso no quiero callarme sino que expresaré la angustiade mi espíritu y haré que escuchen la pena de mi alma. (Job 7, 11)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina