Gefunden 46 Ergebnisse für: libros sagrados

  • Despedazó las estelas, los cipos sagrados y llenó sus lugares de huesos humanos. (II Reyes 23, 14)

  • Otros cuidaban del mobiliario, de los objetos sagrados, de la flor de harina, del vino, del aceite, del incienso y los perfumes. (I Crónicas 9, 29)

  • La distribución se hizo por suerte entre unos y otros, pues tanto los descendientes de Eleazar como los de Itamar tenían funcionarios sagrados y funcionarios de Dios. (I Crónicas 24, 5)

  • Le dejó también la descripción de todos sus proyectos respecto 2de los atrios del templo del Señor, las cámaras de alrededor, los tesoros del templo del Señor, los depósitos sagrados; (I Crónicas 28, 12)

  • y la llevaron al templo con la tienda de la reunión y todos los utensilios sagrados que había en ella. La llevaron los sacerdotes y los levitas. (II Crónicas 5, 5)

  • Destruyó los altares de los dioses extranjeros, las colinas, las estelas y los cipos sagrados; (II Crónicas 14, 2)

  • De acuerdo con el pueblo, designó cantores, que, revestidos con los ornamentos sagrados, iban delante del ejército cantando y alabando al Señor: "Alabad al Señor, porque es eterno su amor". (II Crónicas 20, 21)

  • Cuando todo acabó, los israelitas que habían estado presentes recorrieron las ciudades de Judá destruyendo los cipos sagrados, las imágenes de Aserá, los lugares de culto de las colinas y los altares en todo Judá, Benjamín, Efraín y Manasés hasta su extinción total. Luego regresaron a sus ciudades, cada uno a su propiedad. (II Crónicas 31, 1)

  • y el gobernador les prohibió comer alimentos sagrados hasta que se presentase un sacerdote para consultar las suertes. (Esdras 2, 63)

  • Y les dije: "Vosotros estáis consagrados al Señor, y sagrados son también estos utensilios; esta plata y este oro son una ofrenda voluntaria al Señor, Dios de nuestros padres. (Esdras 8, 28)

  • y el gobernador les prohibió comer alimentos sagrados hasta que se presentase un sacerdote para consultar las suertes. (Nehemías 7, 65)

  • Pero él arrasó sus templos, taló sus bosques sagrados y destruyó todos sus dioses, para que adorasen solamente a Nabucodonosor, y todas las lenguas y todas las tribus le invocasen como dios. (Judit 3, 8)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina