Encontrados 143 resultados para: oblación

  • Esto, además del holocausto mensual y de su oblación, del holocausto perpetuo y de su oblación y sus libaciones, según la norma correspondiente, como calmante aroma, manjar abrasado para Yahveh. (Números 29, 6)

  • su oblación de flor de harina amasada con aceite, será: tres décimas por el novillo, dos décimas por el carnero, (Números 29, 9)

  • y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado de la fiesta de la Expiación, del holocausto perpetuo, de su oblación y sus libaciones. (Números 29, 11)

  • la oblación correspondiente será de flor de harina amasada con aceite, tres décimas por cada uno de los trece novillos, dos décimas por cada uno de los dos carneros, (Números 29, 14)

  • y un macho cabrío como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y su libación. (Números 29, 16)

  • y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y sus libaciones. (Números 29, 19)

  • y un macho cabrío como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y su libación. (Números 29, 22)

  • y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y su libación. (Números 29, 25)

  • y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y su libación. (Números 29, 28)

  • y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado; además del holocausto perpetuo, de su oblación y su libación. (Números 29, 31)

  • y un macho cabrío como sacrificio por el pecado; además del holocauso perpetuo y de su oblación y su libación. (Números 29, 34)

  • la oblación y libaciones correspondientes al novillo, al carnero y a los corderos, conforme a su número y según la norma; (Números 29, 37)


“A pessoa que nunca medita é como alguém que nunca se olha no espelho e, assim, não se cuida e sai desarrumada. A pessoa que medita e dirige seus pensamentos a Deus, que é o espelho de sua alma, procura conhecer seus defeitos, tenta corrigi-los, modera seus impulsos e põe em ordem sua consciência.” São Padre Pio de Pietrelcina