Encontrados 132 resultados para: comunidad

  • Moisés hizo como le había mandado Yahveh: tomó a Josué y lo puso delante del sacerdote Eleazar, y delante de toda la comunidad. (Números 27, 22)

  • y llevaron los cautivos, la presa y el botín ante Moisés, ante el sacerdote Eleazar y ante toda la comunidad de los israelitas, al campamento, en las Estepas de Moab, que están cerca del Jordán, a la altura de Jericó. (Números 31, 12)

  • Moisés, el sacerdote Eleazar y todos los principales de la comunidad salieron a su encuentro hasta fuera del campamento. (Números 31, 13)

  • Precisamente ellas fueron las que indujeron a prevaricar contra Yahveh a los israelitas, siguiendo el consejo de Balaam, cuando lo de Peor; por eso azotó la plaga a la comunidad de Yahveh. (Números 31, 16)

  • «Sacad la cuenta, tú, el sacerdote Eleazar y los principales de las familias de la comunidad, del botín y de los cautivos, hombres y bestias. (Números 31, 26)

  • Luego repartirás el botín, la mitad para los combatientes que fueron a la guerra y la otra mitad para toda la comunidad. (Números 31, 27)

  • esta mitad correspondiente a la comunidad era de 337.500 cabezas de ganado lanar; (Números 31, 43)

  • y los hijos de Gad y los hijos de Rubén fueron y dijeron a Moisés, al sacerdote Eleazar y a los principales de la comunidad: (Números 32, 2)

  • el país que Yahveh conquistó delante de la comunidad de Israel es tierra de ganado, y tus siervos tienen ganado.» (Números 32, 4)

  • Esas ciudades os servirán de asilo contra el vengador; no debe morir el homicida hasta que comparezca ante la comunidad para ser juzgado. (Números 35, 12)

  • la comunidad juzgará entre el homicida y el vengador de la sangre según estas normas, (Números 35, 24)

  • y salvará la comunidad al homicida de la mano del vengador de la sangre. Le hará volver la comunidad a la ciudad de asilo en la que se refugió y en ella vivirá hasta que muera el Sumo Sacerdote ungido con el óleo santo. (Números 35, 25)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina