Encontrados 239 resultados para: cuatro jinetes

  • Y aquel mismo día, todos sus guerreros levantaron el campamento. Su ejército se componía de ciento setenta mil soldados de infantería, y de doce mil jinetes, sin contar los encargados del equipaje y los hombres de a pie que los acompañaban: era un inmensa multitud. (Judit 7, 2)

  • Todo el ejército asirio -los soldados, los carros de guerra y los jinetes- mantuvieron el cerco durante treinta y cuatro días. A todos los habitantes de Betulia se les agotaron las reservas de agua (Judit 7, 20)

  • Judit había permanecido viuda en su casa durante tres años y cuatro meses. (Judit 8, 4)

  • Mira que los asirios, colmados de poderío, se glorían de sus caballos y sus jinetes, se enorgullecen del vigor de sus soldados, confían en sus escudos y sus lanzas, en sus arcos y sus hondas, y no reconocen que tú eres el Señor, el que pone fin a las guerras. (Judit 9, 7)

  • y de pronto sopló un fuerte viento del lado del desierto, que sacudió los cuatro ángulos de la casa. Esta se desplomó sobre los jóvenes, y ellos murieron. Yo solo pude escapar para traerte la noticia. (Job 1, 19)

  • y los envió con cuarenta mil soldados y siete mil jinetes, para que invadieran el territorio de Judá y lo arrasaran, como lo había ordenado el rey. (I Macabeos 3, 39)

  • Gorgias tomó cinco mil hombres y mil jinetes elegidos, y el ejército partió durante la noche (I Macabeos 4, 1)

  • Al año siguiente, Lisias reunió sesenta mil hombres elegidos y cinco mil jinetes para combatir contra los judíos. (I Macabeos 4, 28)

  • El número de sus fuerzas era de cien mil soldados, veinte mil jinetes y treinta y dos elefantes adiestrados para la guerra. (I Macabeos 6, 30)

  • Los animales estaban repartidos entre los batallones. Al lado de cada elefante se alineaban mil hombres con cota de malla y cascos de bronce, además de quinientos jinetes escogidos. (I Macabeos 6, 35)

  • de donde partieron con veinte mil hombres y dos mil jinetes en dirección a Berzet. (I Macabeos 9, 4)

  • Al enterarse de esto, Apolonio puso en pie de guerra tres mil jinetes y una numerosa infantería, y partió en dirección a Azoto, como si fuera de paso; pero al mismo tiempo se iba adentrando en la llanura, confiado en su numerosa caballería. (I Macabeos 10, 77)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina